TRES AÑOS DE GOBIERNO MASÓNICO

El Plural / PolíticaPOLÍTICA06/07/2007

De la Cierva insiste en que no es una “manía” personal suya"EpC, una marea programada por la Internacional Socialista y la Masonería”S.C.“No es ninguna manía, la mía, la de ver a la masonería por todas partes. Es que lo está”. Así justifica el periodista Ricardo de la Cierva en las páginas de Alfa y Omega que, detrás de la asignatura de Ecuación para la Ciudadanía (EpC), también encuentre a los masones.Alfa y Ómega, la revista del arzobispado de Madrid que se incluye como suplemento en las páginas de ABC, incluye en su último número una entrevista a Ricardo de la Cierva, el periodista e historiador de cabecera de la COPE que ocupara diferentes cargos en la administración franquista y fue ministro de Cultura con UCD en 1980.

Contubernio de la Internacional y los masones
La entrevista aborda inicialmente los contenidos del libro ZP, tres años de gobierno masónico, pero deriva en diferentes reproches hacia Educación para la Ciudadanía. Para De la Cierva, la “problemática” de la asignatura “no es casual”, sino que es “una marea programada por el conjunto de dos frentes: la Internacional Socialista y la Masonería”.

“Apoderarse del alma de los niños”
El periodista-historiador establece un paralelismo entre la II República y el actual Gobierno de Zapatero, señalando que ya entonces un responsable de educación, Rodolfo Llopis, al que define como masón y leninista, concibió el plan de “apoderarse del alma de los niños”. “El señor Zapatero ha dicho claramente que pretende restaurar los valores de la Segunda República”, advierte.

Los niños no podrán huir a otros países de Europa
De la Cierva también encuentra argumentos para explicar que EpC sea un proyecto europeo y no sólo fruto de los planes de ZP: “este es un objetivo que la Masonería desea para toda Europa”, y remite a una propuesta para extender el ideal masónico de “Jacques Mitterrand, primo del ex presidente francés y durante muchos años Gran Maestre del Gran Oriente de Francia, y la vez grado 33 de la Masonería y alto directivo del Partido Socialista francés”.

Quizá alguno no sea satánico
Insiste en que la masonería marca el rumbo europeo y español: “este Gobierno es masónico porque el presidente es masón, media docena de ministros y ministras lo son, más o menos el mismo número que había al empezar la República”.

El demonio, "por todas partes"
De la Cierva asegura que Iglesia y masonería son incompatibles pues ésta última es “esencialmente anticristiana. De hecho, hay un porcentaje importante de satanismo”. Deja abierto un momentáneo resquicio a la esperanza que más tarde cierra abruptamente: “se pueda estar y no cultivar el satanismo, pues la masonería es muy libre y muy democrática, pero si uno profundiza, se encuentra satanismo por todas partes”.